martes, 9 de junio de 2015

Bombones

Tamara sabia que debía lidiar con la mujer de Rodrigo. Imaginaba como sería su respuesta cuando se enfrentara a  él y le diera la oportunidad de elegir, seguramente sonaría convencional  y hasta en un punto irrisorio. Entró en su casa y divisó un elegante paquete sobre la mesa. Se acerco y vio que eran bombones. Una tarjeta con solo cuatro palabras “Te amo, Rodrigo”. Su rostro se iluminó, y la tristeza que la perseguía se desvaneció. Abrió la caja, eligió el más grande, lo llevo a su boca, sin saber que esa sería la última vez que vería a Rodrigo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario